Administraciones en red

Este pasado viernes, 21 de noviembre, he participado en una jornada de contraste del libro blanco de democracia y participación ciudadana para Euskadi, celebrada en Vitoria-Gasteiz.

Reconozco que no conecté con la metodología de la jornada y que no acerté a trasladar las aportaciones que había preparado para esta sesión de contraste.

Así que recurro a este medio, ya viejuno, del blog para intentar aportar humildemente mi granito de arena al contenido del libro blanco, por si todavía llego a tiempo.

La parte que más me interesa es la de los compromisos, porque pienso que ahí puede radicar el valor diferencial de este libro blanco. Ya existe abundante material sobre teorías, reflexiones y metodologías de participación ciudadana. La clave de este libro blanco está en los compromisos que el Gobierno Vasco y, en su caso, el resto de instituciones públicas vascas asuman aquí y ahora en esta materia.

Desde mi punto de vista, los compromisos se pueden clasificar en los cuatro bloques siguientes:

• Sensibilización y capacitación: conseguir una administración participativa tiene que ver con los valores de las personas que la conformamos y con la cultura de la propia organización. Por tanto, bueno será empezar por las acciones de sensibilización y formación que promuevan los valores y la cultura que faciliten avanzar hacia esa administración participativa.

• Metodología y recursos: además de la sensibilización y capacitación de las personas, es necesario dotar a la organización de las metodologías y recursos que permitan abordar en condiciones adecuadas el ambicioso reto de la participación ciudadana.

• Puesta en práctica de la participación: sobre la base de los puntos anteriores, la hora de la verdad es la puesta en marcha de iniciativas y proyectos que hagan realidad la incorporación de la participación ciudadana en la sistemática de gestión de las políticas públicas.

• Comunicación y difusión: además de llevar a la práctica la participación, parece buena idea comunicar y difundir las buenas prácticas realizadas, con el fin de promover la participación ciudadana en el conjunto de las administraciones públicas.

Todos los compromisos incluidos en la versión actual del libro blanco pueden clasificarse en estos cuatro bloques (se incluye, también, alguna de mi cosecha):

• Sensibilización y capacitación:

• Las acciones de presentación y difusión del libro blanco podrían encuadrarse en este bloque.

NOTA: Las acciones de sensibilización y capacitación pueden abarcar un ámbito más amplio, incluyendo otras materias como el código ético, la gestión avanzada o la evaluación de las políticas públicas. Así mismo, puede aprovecharse otras iniciativas ya en marcha, como Egiten Ikasi, para incorporar también, entre sus contenidos, la transparencia y la participación. Estas acciones estarían dirigidas tanto a los altos cargos como al personal funcionario.

• Metodología y recursos:

• Desarrollo normativo de la participación ciudadana.
• Evaluación de al menos 6 procesos participativos de las últimas dos legislaturas para sentar bases conceptuales y extraer conclusiones de aplicación a futuros procesos.
• Desarrollar indicadores que evalúen los procesos en su totalidad.
• Adecuación organizativa para posibilitar la participación, la externa y la interna, promoviendo una visión más transversal y multidimensional.
• Cambios en los procedimientos y en la gestión interna, buscando la complicidad de las personas y facilitando su protagonismo.

• Puesta en práctica de la participación:

• Mejorar, completar y actualizar la información publicada en euskadi.net y, en particular, la información relativa a organización, procedimientos administrativos, actividad del gobierno, planes e iniciativas legislativas, convenios, contratos y encomiendas de gestión, gestión económica, gestión de personal, evaluaciones de las políticas públicas, y proyectos de transparencia y participación ciudadana.
• Open data: continuar la política de Open data, para garantizar la transparencia y generar valor económico, social y público.
• Integrar las quejas y sugerencias de la ciudadanía en los procesos de diseño y evaluación de los servicios y las políticas públicas.
• Establecer mecanismos y órganos competentes para la recepción de propuestas, reclamaciones, etc. del tejido asociativo.
• Activar procesos de empoderamiento de personas y colectivos desde un papel de facilitador, incorporándolos en sus procesos de reflexión.

• Comunicación y difusión:

• Comunicación y difusión: Debe comunicarse tanto externa como internamente, como medio para el desarrollo de una nueva cultura administrativa.
• Portal de participación ciudadana, en el que se publiquen materiales divulgativos y formativos, documentos metodológicos y guías prácticas para la participación, información sobre las experiencias de participación llevadas a cabo, evaluaciones de los procesos participativos, etc.
• Participación en foros interadministrativos e interinstitucionales que tengan por objeto compartir conocimiento, desarrollar recursos metodológicos y, en general, promover la cultura y la práctica de la participación ciudadana.
• Colaboración con otras administraciones públicas e instituciones privadas para promover la participación.

La participación debe integrarse en la sistemática de gestión de los servicios y de las políticas públicas (veasé “Modelo LUDO: el gobierno abierto desde la perspectiva del ciclo de las políticas públicas”, Alberto Ortiz de Zarate). Por ello, la aplicación de la participación le corresponde a cada órgano competente en el marco de la gestión de sus áreas de actuación. No obstante, cabe identificar algunas acciones transversales, a impulsar por un órgano como la DACIMA, encaminadas a promover la cultura y la práctica de la participación en el conjunto de la organización del Gobierno Vasco. Estas acciones transversales son, en esencia, las mismas que se identifican en el apartado 6 “Los medios para implantar el Modelo de Gestión Pública Avanzada del Gobierno Vasco” del Modelo de Gestión Avanzada del Gobierno Vasco: impulsar, capacitar, facilitar, experimentar, acompañar, detectar, compartir, reconocer y difundir.

Los compromisos del libro blanco pueden orientarse desde los siguientes enfoques:

• Acción inmediata / Medio plazo: cabría concretar en este libro blanco los compromisos a abordar de forma inmediata, que podrían tener que ver, por ejemplo, con acciones de sensibilización, visibilizar la participación (por ejemplo, a través de un portal web temático sobre participación o la organización de alguna jornada sobre el tema), la evaluación de experiencias históricas para ir sentando las bases metodológicas y, por supuesto, la realización de algunos proyectos concretos de participación. Y cabría también apuntar, con orientación de medio plazo, el compromiso de elaborar un plan de participación (extensible también a la transparencia y, en general, el buen gobierno), que podría consensuarse en esta legislatura, de forma que pudiera aprobarse al inicio de la próxima. El libro blanco podría adelantar unas orientaciones y un esquema de contenido del plan.

• Dentro / fuera: los cuatro bloques indicados anteriormente son de aplicación, tanto hacia dentro de las estructuras de la Administración pública, como hacia fuera, es decir, hacia la ciudadanía. En la versión actual del libro blanco, se recogen algunas actitudes y comportamientos esperables de una ciudadanía cívica y corresponsable. Cabría traducir estos comportamientos ciudadanos deseables en compromisos del Gobierno orientados a promoverlos, empezando por medidas a aplicar en el sistema educativo y continuando por acciones de facilitación y promoción de la participación ciudadana, tales como:

• Educación para la participación (sobre todo, pero no sólo, a través del sistema educativo).
• Promover el reconocimiento social de la participación y reconocer como interlocutores legítimos a las asociaciones que conforman el tejido participativo organizado de Euskadi.
• Habilitar espacios y recursos para la participación, a disposición de las instituciones públicas y privadas y de las organizaciones de la iniciativa ciudadana y social.
• Organización del tiempo que facilite la participación: reparto del trabajo, reducción de las jornadas, medidas de conciliación, permisos, etc.

En cuanto a los compromisos recogidos con respecto a los cinco ámbitos concretos de actuación incluidos en el libro blanco, si bien pueden suponer una cierta orientación para los procesos que puedan ponerse en marcha en ellos de cara a propiciar la participación ciudadana, hay que tener en cuenta que han sido identificados por un número reducido de personas que han reflexionado durante un periodo breve de tiempo. Si estos procesos se pusieran efectivamente en marcha con la participación de un mayor número de personas y con una mayor dedicación de tiempo, las líneas de actuación identificadas serían superadas, a buen seguro, con muchas más propuestas en las primeras fases del proceso. Por tanto, desde mi punto de vista, más interesante que la relación de compromisos concretos con respecto a cada una de estas áreas de actuación, sería establecer compromisos con respecto al calendario de ejecución de los procesos participativos en cada una de estas áreas. Estos compromisos podrían incluirse en el plan de participación propuesto anteriormente.

Finalmente, sería deseable que se cumpliera el propósito expresado en la página 11 de la versión del documento presentada a contraste: “Este Libro Blanco está promovido por Gobierno vasco, pero queremos que sea un Libro Blanco para Euskadi”. Para ello, el Gobierno podría asumir el compromiso de trabajar para la extensión de los principios y recomendaciones del libro blanco en el conjunto de las administraciones públicas vascas, por ejemplo mediante:

• la creación de instrumentos de colaboración interadministrativa en materia de participación ciudadana (consejo, comité, foro, etc.)
• la identificación y puesta en marcha de algunos proyectos piloto de colaboración en materia de participación ciudadana.

Aprovecho para reconocer el gran trabajo que han realizado las personas integrantes del equipo de proyecto de este libro blanco, así como el entusiasmo y buena disposición que he observado en todas las personas con las que he coincidido en las jornadas de este proceso en las que he participado.