Administraciones en red

No se por qué me había parecido que no hacía falta comentar los perfiles de la blogosfera pública, como si la cosa estuviera evidentemente clara. La cuestión es que he podido comprobar off-line que no es así, o sea, que no estaría de más pararse a reflexionar un momento sobre que blogs forman la blogosfera pública y, por tanto, deberían incluirse en el directorio.

A primera vista, me parece que la blogosfera pública estaría formada por los blogs que tratan sobre cualquiera de los múltiples aspectos de la Administración pública con una frecuencia más que esporádica. No me parece que la Administración pública deba ser la materia exclusiva del blog, pero sí una de sus categorías habituales.

No vale con ser empleado público. Conozco uno que tiene un blog excelente sobre literatura y que le basta y le sobra con dedicar su jornada laboral a la Administración pública. Me parece perfectamente comprensible. Si queréis que os diga la verdad, más comprensible que lo nuestro. Pero su blog ni pertenece a la blogosfera pública ni lo pretende de ninguna forma.

Tampoco vale con ser político. Hay muchos políticos que tienen blog y que tratan de política. Creo que pertenecen a la blogosfera política. Tan respetable como la blogosfera pública, pero es otro coté de la blogosfera.

Por eso hemos incluido en el directorio sólo a los políticos que ocupan cargos en la Administración pública. Aquí cabría alguna duda en casos como el de Jordi Sevilla que, aunque sea titular de un ministerio nuclear para la Administración pública, apenas trata de los temas del ministerio, lo cual es una pena, por cierto, porque nos encantaría tener ocasión de conversar directamente con él sobre modernización administrativa, Administración electrónica o funcionarios públicos. ¡A ver si manteniéndole en el directorio se anima a hacerlo!.

Reconozco que no es fácil establecer los límites, sobre todo cuando se trata de fenómenos espontáneos, ricos y dinámicos, como es el caso.

Estas ideas no pretenden fijar un dogma, sino abrir el debate para contrastarlas con las vuestras. No es cuestión de poner el cartel de «reservado el derecho de admisión«, pero tampoco nos gustaría que se desvirtuara el directorio, porque entonces no serviría para nada.

Tal vez el mejor criterio venga dado por la participación en las conversaciones entre los blogs que tratamos sobre la Administración pública. Alguien dijo que el movimiento se demuestra andando.

En fin, ésta es sólo una opinión. Estaría bien que hubiera otras para ampliar la perspectiva.