Administraciones en red

Comenzamos el curso escolar con una de esas obviedades que merece la pena recordar de cuando en cuando. El hecho de contar con algunos blogs en el portal institucional no convierten a una Administración en una Administración 2.0. Es más, los blogs, incluso los wikis, por sí solos, son irrelevantes.

Esta reflexión me llega después de leer el didáctico artículo de César Calderón «10 razones para que la Administración pública se apunte a la web 2.0«. En este caso, las razones que aporta son todas válidas, y muy oportunas para alguien que se esté iniciando en este mundo. Sin embargo, me parece una explicación que cojea de la misma pata que están cojeando muchas otras.

Estamos dando demasiada importancia a las herramientas, cuando lo que define el dospuntocerismo son los valores.

En el caso de César, o de otros viejos rockeros del blog, ya sabemos que esos valores están presentes, pero el gestor público que recién aterriza en este mundo va a tender a simplificar. Al final, la transformación en una Administración 2.0 se limitará a un contrato para que una empresa externa implemente una plataforma de herramientas sociales. Y, de nuevo, esto es más que tecnología.

La conversación iniciada por nuestro Netoratón ha sido brillantemente continuada por Sergio Maldonado en un nuevo blog que comienza con mucha fuerza: «Estrategia Digital | claves de la eAdministración 2.0«. En el artículo «¿Por qué entrar en web 2.0/social media?» hace un repaso a otras razones desde una perspectiva no herramental, sino pegada a valores tales como la transparencia y la participación.

Gracias por la conversación, César y Sergio. Tal vez con la suma de los dos posts tengamos una visión completa. En todo caso, creo que es de suma importancia dejar claro desde el principio que las herramientas son sólo herramientas, por más que no sean neutras y pese a reconocer que a partir de un primer uso más o menos ingenuo pueden acabar abduciendo al usuario a territorios dospuntocéricos.

De hecho, creo que estamos en un punto en que los árboles no dejan ver el bosque. Reformulo: las herramientas 2.0 no dejan ver la red. Blogs, wikis y el resto de la panoplia están muy bien. Son estupendos, pero hay todo un campo abierto para la innovación y que está quedando en segundo plano.

Hay que pensar con lógica 2.0. Por ejemplo, llega la hora de decir adiós a los portales institucionales y dejar la información en manos de los ciudadanos en formatos que permitan: a) que cada cual se construya su portal y b) que cada cual aporte información. Un eGov2.0 abierto y remezclado.

Debemos traducir el término prosumidor al campo ciudadano, con ejemplos como este último. No se trata, por lo tanto, sólo de “escuchar” y de “llegar” al ciudadano, sino también de lograr su participación en la definición y prestación de servicios. Aún más, hay que contemplar las relaciones p2p que aporten valor público sin necesidad siquiera de que la Administración intermedie.

Remito al cuadro de David Osimo que encabeza este post, tomado de su canónico informe sobre el uso de las aplicaciones de la web 2.0 en la administración pública, para ePractice.eu. Allí encontraréis ejemplos de aplicaciones 2.0 en la Administración más allá de las herramientas típicas.

Una aclaración quizá innecesaria: el empleo coherente de blogs, wikis, plataformas para compartir contenidos digitales, microblogging, redes sociales… me parece de vital importancia para construir una Administración 2.0, o una Administración abierta, o como queramos llamarla. Y, para esos usos, soy partidario de no inventar nuevas aplicaciones, sino hacer uso de las ya existentes y relacionarse con las ya existentes comunidades de personas que constituyen la web 2.0. Sigo siendo partidario de la tecnología pop para la Administración.