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Materiales del curso funkziona web!
Mañana, 17 de marzo estaré en la Escuela Riojana de Administración Pública con el grupo pionero del programa formativo funkziona web!
Tal como os he contado, vamos a trabajar en entorno privado, para evitar el pánico inicial de los alumnos a que todos puedan ver sus primeros pinitos en la web 2.0. Ya que no tenéis acceso a fisgar, por lo menos quiero compartir con vosotros las presentaciones que acompañan la experiencia.
Las he agrupado en este evento de SlideShare.
En el capítulo de agradecimientos, debo añadir a César Calderón que ha netoratoneado la noticia con tanta ilusión como si fuera hija suya. Y, en parte, lo es: de él y de todos vosotros.
funkziona web!: el curso
La primera vez que hablé ante el público de la evolución del «funcionata Office» hacia el «funcionario web», fue en Cáceres, con ocasión del eFindex 2007. Después tuve la fortuna de compartir escenario y copeo posterior con Genís Roca, que iluminó mis primeras intuiciones. Con ocasión del II Congreso de QEPEA, en mayo de 2008, tuve la necesidad de powerpointear estas ideas y acabaron cristalizando en un concepto nuevo: funkziona web!
Lo que hay detrás del concepto funkziona web! es la idea de que los trabajadores del conocimiento deben aprender nuevas habilidades para una concepción relacional de su trabajo, con soporte en la red. Un proceso lógico de aprendizaje supone adquirir esas habilidades, que encapsulan tecnología+valores+comportamientos.
Para conocer mejor el planteamiento, aquí tenéis:
- una explicación del paso de funcionata office a funkziona web!
- la presentación que hice en QEPEA
Recibí algunas felicitaciones por la idea y por la presentación, pero probablemente hubieran pasado como una estrella fugaz más, de no ser porque Máximo Fraile, director de casi todo lo interesante (calidad+TIC+ciudadanía) en el Gobierno de La Rioja, me pidió que lo hiciera realidad.
El 17 de marzo impartiré el primer curso. Mi trabajo ahora está siendo transformar el esquema inicial en contenidos que respalden nuestro diseño didáctico.
Y, una vez más, ¡cómo no! pido vuestra ayuda.
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