Un viaje de estudios a la empresa 2.0
Cine Amaya. Una 600 personas, entre alumnado, profesorado y progenitura. Mi contribución ha consistido en impartir una conferencia en torno a la «empresa 2.0«. Creo que los liantes han sido Iñaki Arenaza y David Sánchez Bote, insignes aprendices, que han conseguido que pase la tarde del viernes entregando diplomas a la última promoción de las Ingenierías Técnicas de Mondragon Unibertsitatea.
He llegado a Mondragon con Pablo, el taxista que me ha llevado. Por el camino le he ido explicando mi ponencia y la hemos enriquecido sustancialmente. Por eso he tenido que empezar dándole las gracias y he acabado reconociendo su autoría en algunas de las ideas que he lanzado. Viva el conocimiento compartido.
Le había prometido a Pablo que no aburriría a los presentes. Al fin y al cabo, vienen a una fiesta de fin de estudios, no a que les suelten la chapa. Por eso he estructurado la charla como un bocadillo: una fábula, a partir de la historia de la ciudad de Brujas, seguida de una pequeña reflexión sobre el dospuntocerismo, para acabar con otra fábula, adaptada del «dilema del Monge«, que nos propuso Sergio el lunes en el Guggy.
Sergio, atención a la adaptación que surgió en conversación con Pablo, mi taxista. La historia del origen de las cooperativas en Mondragon es muy similar a la del monasterio shaolin. Un monje -en este caso, un cura, el padre Arizmendiarreta– llega a un valle perdido. Allí, con un grupo de aprendices, decide organizar una comunidad de trabajo donde la clave es compartir. Esta comunidad que comparte se eleva sobre su tiempo y alcanza unas cotas de éxito impensables. ¿Cómo lo ves? En el cine Amaya encajó bien.
Compartí mesa con Jon Altuna (director académico de EPS), José Ramón Goikoetxea (presidente de EPS), Vicente Atxa (decanor de EPS), Iosu Zabala (rector de MU) y Carlos García (director de investigación de EPS). Nos repartimos la entrega de diplomas y después tuvimos la ocasión de escuchar a OREKATX, unos txalapartaris mestizos que me gustaron mucho.
Volví a casa con Jesús, otro taxista, que dijo que le había gustado mi blog. Los taxistas de la Universidad de Mondragon son los mejores contertulios que uno pueda encontrar. Gracias a todos.
P.S.: No hay artículo sobre el padre Arizmendiarreta en la wikipedia, y el que está en euskera es un apunte esquelético. ¡Alguien de la universidad que lo arregle!
Alberto otra vez hay que darte la enhorabuena, va a haber que sacarse una tarifa plana de enhorabuenas para ahorrar.
Es Impresionante la capacidad de un ser humnano cuando cree en un proyecto, confía en sí mismo y dirige todas sus energías en pos de una causa noble, como es el caso.
En vez de ovejas y tonterías ya podían andar clonando Arizmendiarrietas.
¿Tanto viaje necesitabas para saber que los auténticos reductos de sabiduría actuales son los taxistas? 😉
Interesante, pero no es lo mismo que verte en vivo.